Precintos 5 y 6

Continúa el juego del gato y el ratón entre el Concello de Redondela y la planta de hormigón de Vilar.

El quinto precinto de las instalaciones ilegales tuvo lugar a finales de diciembre, con su consiguiente rotura e incumplimiento, así como de la correspondiente cobertura de los periódicos locales, que siguen con expectación la partida.



El juego, aunque repetitivo, no deja de ser curioso para los espectadores no involucrados en el asunto, que cada mes asisten a un nuevo precinto con asombro de la "cara dura" de los responsables de la empresa que continúan con su actividad como si nada.

En cambio, para los que sí nos vemos indirectamente afectados, aunque desgraciadamente estamos limitados para participar en la partida, las cosas son muy diferentes. Asistimos con una mezcla de resignación y desesperación esperando que el próximo movimiento sea el definitivo y acabe el juego. No parece, sin embargo que esto vaya a suceder a corto plazo, pues este miércoles 10 de Febrero tendrá lugar el sexto precinto.

Sin llevar a cabo ninguna otra medida más eficaz que garantice la paralización de las actividades, el Concello de Redondela parece no tener otra intención que continuar con los precintos, cada 15 días aproximadamente, y así me lo manifestaron, sin importarles lo inútil de esta medida.

Ante los medios de comunicación, los responsables del Ayuntamiento han preferido callar y no dar respuesta a las dudas que surgen ante una situación tan estrambótica. ¿Qué piensa hacer el Concello de Redondela ante la desobediencia de esta empresa?. Sabemos que se ha iniciado un procedimiento en el juzgado para depurar responsabilidades, pero ¿qué pasa mientras esto no se resuelve?, ¿permitirán que la empresa continúe trabajando sin las preceptivas licencias?, ¿van a esperar a ver si se las conceden? y entonces, si esto fuera así ¿qué pasará con estos 4 años que estuvieron utilizando las instalaciones ilegales?¿Seguirán precintando inútilmente cada 15 días? y ¿durante cuánto tiempo?. Cada vez que llevan a cabo un nuevo precinto, amigos, conocidos, personas que siguen el caso, o incluso los propios periodistas me hacen preguntas similares, asombrados de que esto suceda una y otra vez. Quisiera darles alguna respuesta, pues eso supondría que yo la tengo, pero tan solo puedo encogerme de hombros y decirles que no lo sé.

Sí se ha pronunciado la empresa, cuyas informaciones en la prensa hacen más daño que el propio precinto. Ejerciendo su derecho a réplica, como es lógico, dan su versión de los hechos, quitando importancia a los mismos y dando apariencia de legalidad. Informan de lo que les conviene, olvidando detalles mucho más significativos como la nulidad de la licencia de actividad. Manifiestan que la legalidad de las obras en cuestión sólo depende de la autorización autonómica, al haber cumplido con el trámite previo ante el Concello de Redondela. Para ellos, el haber presentado la documentación y pagado las tasas supone casi tener en su poder la licencia, que no dudan en que obtendrán, en un alarde de optimismo sin precedentes. Para fundamentarlo mencionan un contencioso contra el Ayuntamiento en el que salieron vencedores, como si efectivamente el juez les hubiese dado la razón. Olvidan, sin embargo señalar, que el pleito se basaba en la petición por parte de la empresa de la licencia de estas obras, como "obras menores" y el rechazo del Ayuntamiento en su concesión. No sólo rechaza el juez que se trate de obras menores, dada su envergadura e importancia, sino que deja entrever la imposibilidad de que puedan ser legalizables atendiendo a la normativa del suelo. Así y todo, la sentencia les es parcialmente favorable al condenar al Ayuntamiento a comenzar de nuevo los trámites y les ratifica en la necesidad de solicitar autorización autonómica. En pocas palabras, no ganaron el juicio porque las obras estén bien y les vayan a dar la licencia, lo ganaron porque el Ayuntamiento actuó mal y tendrá que ser la Xunta la que decida si le dan la licencia o no.

Mientras tanto, seguiremos como meros espectadores de este absurdo toma y daca, con la esperanza de que pronto termine, apostando en qué número de precinto acabará.

Para finalizar quisiera dar las gracias a Faro de Vigo y Atlántico Diario por su cobertura del tema, muy especialmente a los redactores de Redondela, sin cuya colaboración no saldría a la luz la problemática existente con esta cementera.